Al bondi que lo lleva al laburo, subió con cara de dormido. Chamuyo al fercho buscando lo lleve gratarola porque no tenía un sope para cargar la SUBE. El Pepe era un tipo de manos callosas y que no le temía al yugo. Sin embargo andaba sin laburo y por eso le explico al al que manejaba el bondi que iba a una changa y que por favor lo llevara . El Pepe comenzaba así su día en este este miércoles. A el que siembre agacho el lomo y llevaba dignidad a su rancho humilde pero con a decencia, ahora había caído en la ¨manga¨ y lo hacia muerto de verguenza.
Andaba por los treinta y pico, según me parece y de su pasado puedo dar fe porque me bastó verle sus manos callosas y su rostro mostrando penas. Cuando se sentó a mi lado , como disculpandose por el mangazo hecho al conductor del colectivo me dijo ¨¿ sabe don? las últimas chirolas se las deje a mi jermu para la leche de los dos gurises que están en casa ¨. Mientras se acomodaba en el asiento me agregó como susurrando que ¨si se me da lo de la changa prometida, esta noche podremos comer los cuatro ¨. Luego continúo mudo todo el viaje.
Con cuantos Pepes nos encontramos en la calle deambulando o sentados en los bancos de las plazas sin saber lo que les ocurre. Es que nunca supieron pedir porque lo que ganaban lo ganaban con su propio sudor. Sin embargo, cuando les cambia la suerte, esos hombres se encierran y pasan privaciones porque solo saben trabajar y eso piden porque no quieren caer en la indignidad.
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