Jueves 12 Jul 2018 | 09:09 am
Avellaneda (Buenos Aires) (AICA): El obispo de Avellaneda-Lanús, Mons. Rubén Frassia, al reflexionar sobre el Evangelio del domingo 8 de julio, expresó que debemos pedir al Señor que aumente nuestra fe, porque cuando uno vive en la fe es más respetuoso de los demás.
El obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, al reflexionar sobre el Evangelio del domingo 8 de julio, expresó que debemos pedir al Señor que aumente nuestra fe, porque cuando uno vive en la fe es más respetuoso de los demás.
“Aquí hay un tema muy importante que quiero destacar -dijo el prelado-: la fe no se inventa, la fe es un don de Dios, con el que nosotros damos nuestro asentimiento, ponemos nuestra adhesión, nuestra voluntad, nuestra confianza. ¡La fe no se inventa, la fe responde a algo objetivamente ya dado.
“El problema es que el ser humano cree que conoce, pero conoce muy poco, conocemos muy poco. Conocemos poco de la naturaleza, conocemos poco de la misma humanidad, conocemos poco de la ecología, conocemos poco de la historia de Dios y de la vida de los hombres. Y a veces nos conformamos con lo que conocemos y creemos que esa es la realidad.
“Se cae en la torpeza del individualismo, la torpeza de la presunción cuando uno cree que se sabe todo, o se caer en la indiferencia cuando se dice: ‘no dependo ni necesito de nadie’, ‘puedo bastarme a mí mismo’; sin embargo es la fe la que nos abre, nos da más respiro, la que ejerce este acto de confianza, de trascendencia de Dios, esa trascendencia que nos humaniza. Pero el problema está en los que piensan que no necesitan y se pierde el tiempo y, más aún, se pierde la vida”.+
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