CARTA ABIERTA AL PRESIDENTE DE LA NACION

Señor presidente de la Nación
 ingeniero Mauricio Macri.

Con el mayor respeto:

En las últimas horas leí que se encuentra planificando sus vacaciones en el Sur y eso no estaría mal, en un contexto distinto al que actualmente vive el país. Señor presidente permítame recordarle que las cosas en nuestra Casa Grande no están bien y se necesita emplear todo el esfuerzo suyo y sus ministros para cambiar las cosas ya que para ello fue elegido. En ese sentido le recuerdo que ya habrá tiempo para el descanso o el de seguir aportando su trabajo, si el pueblo decide reelegirlo, pero hoy es tiempo de trabajo y trabajo.
                                     Señor presidente usted, al igual que muchos otros empleados elegidos en elecciones libres y democráticas para que traban en favor del pueblo y no para que sus vidas se discurra con ventajas que jamás podrá gozar un trabajador. Usted y los legisladores fueron elegidos para servirnos y no para servirse. Por esa razón, en estos tiempos difíciles ninguno de los responsables de dirigir los destinos del país puede pensar en vacaciones. Usted se ira a descansar, pero nosotros quedaremos aquí padeciendo los calores del veranos ya que , como usted sabrá se nos hará difícil buscar alivio con ventiladores o aires acondicionados por una razón que no escapas de su conocimiento, aunque se lo recuerdo : el enorme costo de la electricidad.
                                     En ese sentido recuerdo que entre usted y todos los que lo acompañan en el gobierno -cuyos salarios salen de lo que pagamos de impuestos – hay grandes diferencia. La más notoria es en los salarios abultados, mientras los jubilados y trabajadores, apenas ganan para mantener una mesa medianamente servida y, que cuando llegan las tasas y servicios, ese magro presupuesto se desequilibra. Señor presidente no escapa a usted que semejante desigualdad pone a la gente de muy mal humor, por lo que de mantenerse semejante desigualdad las cosas pueden complicarse para todos.
Faltan pocas horas para que celebremos la Navidad y pienso que es buen momento para que recapacite y piense en los más necesitados, muchos de los cuales, seguramente lo votaron. Deje de lado sus vacaciones , replantee el rumbo que la ha dado a este barco llamado Argentina , no lo continúe rumbeando hacia la tormenta porque las olas son demasiado altas y violentas, de un golpe de timón y busque un rumbo seguro.

GERARDO SCIOSCIA 

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