Martes 16 Jul 2013 | 12:02 pm
Mons. Rubén Frassia.
Avellaneda (Buenos Aires) (AICA): El obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, divulgó por radios de la capital federal y el conurbano bonaerense una reflexión en torno a la parábola del buen samaritano. El prelado indicó que amar a Dios y al prójimo no es solamente “sentir” el deber de ayudar, sino “querer” y comprometer la voluntad para procurar y realizar el bien.
El obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, divulgó por radios de la capital federal y el conurbano bonaerense una reflexión en torno a la parábola del buen samaritano, e indicó que amar a Dios y al prójimo no es solamente “sentir” el deber de ayudar, sino “querer” y comprometer la voluntad para procurar y realizar el bien.
Monseñor Frassia expresó que esta parábola “tiene mucha profundidad y claridad”, ya que responsabiliza al hombre de fe a un “amor concreto”, como el que se rinde a Dios, de forma incondicional y absoluta, y que por extensión tiene que volcarse hacia los hermanos.
“Querer significa hacer el bien, procurar el bien, ayudar a que viva en el bien. Muchas veces nosotros, con nuestras oscuridades y limitaciones, no hacemos el bien que deberíamos hacer. A veces hacemos un ‘acto de caridad’ para sacarnos de encima el problema; a veces no damos tiempo a las personas; otras tantas veces nos callamos la boca y no crecemos”, alertó.
El prelado llamó a discernir si realmente se está amando más a Dios y si se ama al prójimo, e invitó a rogar a Dios para que permita descubrir quién es el prójimo, qué necesita y de qué modo se lo puede ayudar. También instó a no tener miedo de “complicarse la vida” o “perder la tranquilidad”. Concluyó: “Lo fundamental es querer hacer el bien”.+
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