En tiempos de necesidad política y de tempestades en alta mar, cualquier salvavidas sirve para atarse a un posible trabajo electivo, con el fin de lograr los objetivos que nunca se van a saber públicamente.
Es que no hay personas políticamente aceptables para encarnar una figura de oposición que sea lo suficiente potable para la sociedad con miras a las próximas elecciones.
Y dentro de ese circulo cerrado que es la familia política, se apela y se recicla a cuanto político se encuentren en el camino, aunque su historial sea por demás cuestionable.
Por esas razones los vecinos, cada año electoral vemos las mismas figuritas pese a los recuerdos pocos felices que se tiene de ellos. Es lamentable, que uno no sepa a quien votar, y termine eligiendo al que tenemos por menos dañino.
Unido todo esto va el voto de carácter obligatorio; que cuando llega el sagrado momento de votar nos provoca un conflicto espiritual y una duda electoral que nos carcome el fondo de nuestra alma. Y surge la duda existencial; lo que mi razón y sentimientos me dice, y a lo que la Ley me obliga.
Ahora, antes de las consabidas festividades, los armadores políticos buscan desesperadamente anudar alianzas de cualquier tipo para posicionarse en el tablero de poder que se vislumbra a poco menos de un año.
Con una maquinaria publicitaria bien afinada, que daría envidia a los señores feudales de la guerra, van dando puntadas finales para tener un puntaje óptimo en su trabajo. Y se afanan de elucubrar entre gallos y medianoche, las alianzas mas insólitas.
Por ejemplo, yo, como vecino de Almirante Brown, desde hace casi cincuenta años, tengo recuerdo pocos felices del gobierno municipal ejercido en ese entonces por Jorge Villaverde; y en su equipo como delfines políticos estaban y están Marta Helguero, Mario Serrano, quienes siempre profesaron una devoción para con Villaverde. Siendo innumerables las notas dadas por ellos donde reconocían su lealtad a él.
Si ud., es muy joven y no sabe quienes son, pregúntenle a sus abuelos; eso si, díganles que por favor al recordar no lloren.
Los nombrados, son los que le armaron la campaña al ex presidente Duhalde, quien paso a la historia, no por prometer dólares y pesos, sino por estar en ejercicio del poder cuando se asesino a Kosteki y a Santillan.
Ahora como todo vuelve, ellos volvieron a la palestra; un delfín MARIO SERRANO, lo hace como referente de Sergio Massa, y lo apoya en su intención el diputado del PRO CARLOS ACUÑA.
El otro; MARTA HELGUERO, viene con la Juan Domingo, apoyando a Scioli.
Ambos en el mismo juego, pero por diferentes esquinas; y el caudillo VILLAVERDE, en un magistral juego de ajedrez, espera pacientemente su turno.
Mientras tanto mueve sus peones como una pinza electoral para dividir las fuerzas que se le puedan oponer.
Un sentimiento de abatimiento se apodera de mí, pensaba que como siempre se predica: renovación, era dejar paso a los jóvenes políticos; quizás no entendí que renovación es igual a reciclar.
Y esta ensalada muy difícil de digerir, es la que tal vez tengamos la obligación de elegir dentro del escenario que se nos presenta.
A veces cuando una comida no se digiere bien, nos ocasiona pesadillas, por eso ruego al Altísimo que en el 2013, los brownianos no tengamos que padecer otra vez; esta pesadilla.
Alfredo Silverio Rodríguez
DNI.11894278
ALSINA 1310
TEL.1567018038
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