BALLET DE SUBALTERNOS

Ballet de subalternos
Como siempre continuamos, aforisticamente hablando, pensando cuestiones que tratamos de darles cierta apertura y lineamiento cada semana. Lógicamente con pretensión de verdad más allá de su manera concisa y concreta. Algunas veces nos sometemos a una problemática que se instaura durante algunas semanas en nuestro verbo, otras las recogemos de vez en cuando, mientras que algunas son presentadas y cerradas en la misma ocasión. Y como diria un gran pensador como Quine, "lo que hay no depende en general del uso que se hace del lenguaje, pero lo que se dice que hay sí depende de tal uso", nos proponemos entonces a seguir permaneciendo en el descifrar los discursos y plantear sus antagonismos y contradicciones.

La disgregación de Libres del Sur en Proyecto Sur, en el conurbano, es un aspecto emocionalmente digno de ser analizado, y explicitado, para todo aquel que soporta la tesis de la pertrecha oportunidad del capitalismo para superar su autodestrucción inevitable, concluyendo la miseria económica en pobreza política. Acaso no fue su principio, en boca de la concejala lanusense Paola Rezzano, de “Nosotros siempre planteamos la posibilidad de jugar por fuera del bipartidismo" (Inforegión 5/5) lo que alimentó la acción de desprendimiento en la fuerza solanista? La "derechización" del gobierno no había sido el puntapié para romper con el kirchnerismo? La precariedad de observación anticipatoria permitió a Libres del Sur estos dos quiebres en su corta historia política. Cual centello del alma que nos conecta con Dios, según el Maestro Eckhart, esta organización hace del principio antes mencionado, el de jugar por fuera de los bloques tradicionales, su máxima inquebrantable. Siguiendo este principio, a Libres del Sur no le quedaría otra opción que entroncarse, siendo adorno en su stand de campaña electoral, en el Frente de Izquierda (PO-PTS-IS), quienes serían los únicos que jugarían por fuera del bipartidismo.
Sin embargo, la capacidad de reflexión sobre las situaciones concretas, en materia económica y política, sentencian, indefectiblemente, el carácter de determinadas personas y grupos. El baldón proporcionará la aceptación y respeto político, o no. Pues así como Weber, en su momento, trató al capitalismo como la consecución de una organización racional, fundamentada en la ética calvinista, relativizando cualquier posicionamiento materialista que involucrase conquistas, apropiaciones, opresiones de todo tipo, es decir, subalternándose a una estructura inmanente e incontrolable, Libres del Sur, hasta el momento por fuera de Lanús, estaría planteando algo similar con respecto a las fuerzas políticas que se baten en esta arena para octubre: "hoy vemos que sólo hay dos opciones y una parte de Libres del Sur busca apostar a eso” (idem.), en referencia al bipartidismo, y la sumisión de Libres del Sur, en ciertas regiones, a Sabbatella. La autonomía con la cual pareciera que están actuando los bloques políticos de Libres del Sur en el conurbano, podría dejar abierta una posibilidad para que existan distintas versiones de Libres del Sur, a partir de sus alianzas, a nivel nacional, en PBA o en distintas secciones electorales. De todas formas, una actitud de este tipo solo reflejaría el paso previo a la fractura de la organización. Lo que queda claro para Libres del Sur es lo siguiente: atarse a Sabbatella es volver a su primer posicionamiento histórico, con lo cual dejaría a Libres del Sur dentro de un círculo vicioso que solo puede emanar olor a oportunismo; romper el cerco del bipartidismo patronal, integrándose al Frente de Izquierda, los llevaría a profundizar su personalidad de denuncia y lucha por reivindicaciones populares, adquiriendo una neo-naturaleza que se asemeja a la inteción de presentarse como opción por fuera de lo tradicional. Los límites de su consideración política, y de lucha, serán los que marcarán su decisión. Como diríamos en nuestros términos: Libres del Sur se planteará si sigue en una posición más bien pasiva respecto a la inmanencia de la subjetividad antipopular, o si intenta romper el verglás que quiebre lo politicamente unilateral algutinador.
SILVANO

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