¿Quién representa a Cristina en Quilmes?
Por Dante López Foresi
Ciertos movimientos y reacomodamientos producidos en el peronismo quilmeño nos obligan a plantearnos quién es el referente que Cristina tiene en la ciudad. Cualquier advenedizo podría aventurarse a opinar que el intendente Francisco Gutiérrez es el hombre K en Quilmes. Pero quienes conocen mínimamente los avatares de la política local, saben muy bien que "el Barba" no goza de la más mínima confianza de la Presidenta de la Nación. Es que es muy difícil que una mujer olvide cuando alguien alguna vez la calificó como "hija de p..." y quemó afiches preelectorales con su rostro.
Basta con observar datos de la realidad. El intendente preferido de la zona sur del conurbano parece ser Cacho Alvarez de Avellaneda, por quien Cristina sentiría una especial predilección, demostrada en las varias veces que la presidenta visitó en los últimos meses esa ciudad ¿O existe otro modo de demostrar cercanía que la presencia física? Incluso Alvarez es el único intendente que acompañó a la Presidenta en su último viaje a EE.UU. Pero por Quilmes, Cristina no aparece. Más claro, imposible.
El principal opositor al intendente Gutiérrez parece haber elegido otros horizontes que lo distancian de Cristina. Sergio Villordo se sumó hace algunos días al sector político que comanda- nada menos- que Eduardo Duhalde. Es más...el ex presidente y el ex intendente ya habrían delineado en Carmen de Patagones una estrategia para convertir a Villordo en el principal referente duhaldista del distrito. Por ende, Villordo quedó muy lejos del proyecto político K, y hasta puede convertirse en su principal opositor, si es que tomamos en cuenta lo que Duhalde representa en contraposición al kirchnerismo.
Eduardo Camaño, en tanto, no es tenido en cuenta como referente nacional, a pesar de haber sido designado como titular del ENRE (Ente Regulador de Electricidad). Su poder partidario en Quilmes es casi nulo. Pero su pacto local con Gutiérrez, con el eterno Ronco Méndez y con el ex anibalista Daniel Gurzi parecen colocar a Camaño en las antípodas de las preferencias de la Presidenta más por asociación que por otra cosa. Recordemos lo que dijo Cristina en pleno conflicto con el campo: "Si se me presentan dudas sobre alguien, me basta mirar quienes son sus aliados e inmediatamente me coloco en la vereda de enfrente".
El único referente kirchnerista y presidencial quilmeño que queda entonces, es el Ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos Aníbal Fernández. No solo por su compromiso con K desde los inicios de la gestión anterior, sino porque a nivel nacional se ha convertido en un verdadero escudero de la presidenta, hasta el punto de destilar un exceso de optimismo al señalar que "en 2011 ganamos con Cristina". Es uno de los ministros que más está cumpliendo la orden de recuperar imagen presidencial con mucha gestión de gobierno. Basta leer los diarios de las últimas semanas y contar las presencias de Aníbal en "letra de molde", como gusta decir a Cristina.
Ante la cercanía temporal de las elecciones internas, todo lo mencionado no es un dato menor. La intención de Néstor Kirchner como titular del Justicialismo es que se eviten disputas en cada uno de los distritos, procurando acuerdos entre los distintos sectores. Algo que parece ser inviable por la dicotomía entre los sectores y las ambiciones personales de los dirigentes ¿O alguien se imagina al Ronco Méndez y Camaño a los abrazos de campaña con Aníbal y al Barba Gutiérrez sacándose fotos con Villordo? Si bien en política todo es posible, lo dicho nos parece altamente improbable. Por ende, la lucha interna será inevitable. A menos que algunos dirigentes resignen sus aspiraciones cumpliendo órdenes de Néstor. Otra cosa altamente improbable ¿Alguna vez un político renunci= 3 al poder?
Tan necesario es el apoyo oficial gestual para enfrentar las internas como el dinero que escasea para afiches y digitar prensa. El apoyo de Carlos Kunkel al intendente Gutiérrez no se verá plasmado en envío de fondos para campaña. Precisamente porque un ultra kirchnerista como él difícilmente pueda convencer a Cristina de apoyar financieramente a quien más la insultó y despreció, sobre todo para enfrentar en elecciones a los candidatos de uno de los ministros mas fieles con que cuenta la presidenta. Lo único que el Barba posee seguro -y no es poco- es el aparato y la caja del municipio. Quizás sea por eso que se aprobó el aumento de tasas en Quilmes. Alguien tiene que pagar los afiches y financiar candidaturas. Ningún funcionario resignará parte de sus sueldos que se aumentaron un 250% al iniciar la actual gestión. Nuevamente, pagará la gente.
Lo cierto, es que más allá de las elecciones internas en el peronismo previstas para marzo, la bisagra en el poder serán las legislativas. Todos buscan reacomodarse..o acomodarse. Las diferencias entre algunos peronistas no parecen ser ideológicas, sino pragmáticas. Pero un proyecto de país tan ambicioso como el kirchnerista no puede darse el lujo de permitir debilidades ideológicas. Para los K, sobre todo, impera más que nunca la posición de "quien no está conmigo, está en mi contra". Así presentadas las cosas, Quilmes con el posible triunfo partidario del oficialismo barbista se encamina a convertirse en un distrito opositor. Hoy lo es, pero en sordina. Una vez conseguido el poder partidario, será difícil evitar que crezcan las ambiciones. Lo que debe analizarse, es cuanto le convien e a la ciudad quedar en la vereda opuesta a los gobiernos de la nación y la provincia.
Algunos dirigentes que claramente quieren ser intendentes en 2011, sabiendo de buena fuente que Gutiérrez no pretenderá (y difícilmente conseguiría de pretenderla) su reelección, están evaluando futuros realineamientos. Uno de ellos nos dijo hace algunas horas: "es muy probable que la gestión de Cristina se encamine y su imagen mejore, ya que no hay nadie que desde la oposición pueda general mística y liderazgo...pero pensar en una gestión exitosa del Barba...es casi una utopía". Con este análisis, podemos prever que grado de compromiso tienen Gutiérrez y sus aliados. Pactos atados con hilos de seda. Villordo será candidato de Duhalde, por decisión propia. Una pregunta se cae de madura: ¿quién será el nuevo delfín de Aníbal Fernández en el distrito? Quizás ese apellido cuente con las mayores probabilidades de alcanzar la intendencia en 2011, si es que la gestión de Guti E9rrez no logra la aceptación social que hoy no posee y el gobierno nacional recupera la imagen perdida durante el conflicto agropecuario. La otra pregunta que nos hacemos es: ¿existe hoy ese hombre kirchnerista que sea lo suficientemente convocante como para ser el candidato a intendente indiscutido? De no ser así y de fracasar Cristina, posiblemente los macristas del distrito contarán con una oportunidad única como para llegar al poder.
Un panorama local demasiado confuso como para preocuparse por un proyecto de país que casi todos los dirigentes mencionados en este artículo juraron sostener. Una vez más, gobiernan las ambiciones por sobre los sueños y las ideas. Y la gente, financia con sus impuestos.
Agenci@ EL VIGÍA
Basta con observar datos de la realidad. El intendente preferido de la zona sur del conurbano parece ser Cacho Alvarez de Avellaneda, por quien Cristina sentiría una especial predilección, demostrada en las varias veces que la presidenta visitó en los últimos meses esa ciudad ¿O existe otro modo de demostrar cercanía que la presencia física? Incluso Alvarez es el único intendente que acompañó a la Presidenta en su último viaje a EE.UU. Pero por Quilmes, Cristina no aparece. Más claro, imposible.
El principal opositor al intendente Gutiérrez parece haber elegido otros horizontes que lo distancian de Cristina. Sergio Villordo se sumó hace algunos días al sector político que comanda- nada menos- que Eduardo Duhalde. Es más...el ex presidente y el ex intendente ya habrían delineado en Carmen de Patagones una estrategia para convertir a Villordo en el principal referente duhaldista del distrito. Por ende, Villordo quedó muy lejos del proyecto político K, y hasta puede convertirse en su principal opositor, si es que tomamos en cuenta lo que Duhalde representa en contraposición al kirchnerismo.
Eduardo Camaño, en tanto, no es tenido en cuenta como referente nacional, a pesar de haber sido designado como titular del ENRE (Ente Regulador de Electricidad). Su poder partidario en Quilmes es casi nulo. Pero su pacto local con Gutiérrez, con el eterno Ronco Méndez y con el ex anibalista Daniel Gurzi parecen colocar a Camaño en las antípodas de las preferencias de la Presidenta más por asociación que por otra cosa. Recordemos lo que dijo Cristina en pleno conflicto con el campo: "Si se me presentan dudas sobre alguien, me basta mirar quienes son sus aliados e inmediatamente me coloco en la vereda de enfrente".
El único referente kirchnerista y presidencial quilmeño que queda entonces, es el Ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos Aníbal Fernández. No solo por su compromiso con K desde los inicios de la gestión anterior, sino porque a nivel nacional se ha convertido en un verdadero escudero de la presidenta, hasta el punto de destilar un exceso de optimismo al señalar que "en 2011 ganamos con Cristina". Es uno de los ministros que más está cumpliendo la orden de recuperar imagen presidencial con mucha gestión de gobierno. Basta leer los diarios de las últimas semanas y contar las presencias de Aníbal en "letra de molde", como gusta decir a Cristina.
Ante la cercanía temporal de las elecciones internas, todo lo mencionado no es un dato menor. La intención de Néstor Kirchner como titular del Justicialismo es que se eviten disputas en cada uno de los distritos, procurando acuerdos entre los distintos sectores. Algo que parece ser inviable por la dicotomía entre los sectores y las ambiciones personales de los dirigentes ¿O alguien se imagina al Ronco Méndez y Camaño a los abrazos de campaña con Aníbal y al Barba Gutiérrez sacándose fotos con Villordo? Si bien en política todo es posible, lo dicho nos parece altamente improbable. Por ende, la lucha interna será inevitable. A menos que algunos dirigentes resignen sus aspiraciones cumpliendo órdenes de Néstor. Otra cosa altamente improbable ¿Alguna vez un político renunci= 3 al poder?
Tan necesario es el apoyo oficial gestual para enfrentar las internas como el dinero que escasea para afiches y digitar prensa. El apoyo de Carlos Kunkel al intendente Gutiérrez no se verá plasmado en envío de fondos para campaña. Precisamente porque un ultra kirchnerista como él difícilmente pueda convencer a Cristina de apoyar financieramente a quien más la insultó y despreció, sobre todo para enfrentar en elecciones a los candidatos de uno de los ministros mas fieles con que cuenta la presidenta. Lo único que el Barba posee seguro -y no es poco- es el aparato y la caja del municipio. Quizás sea por eso que se aprobó el aumento de tasas en Quilmes. Alguien tiene que pagar los afiches y financiar candidaturas. Ningún funcionario resignará parte de sus sueldos que se aumentaron un 250% al iniciar la actual gestión. Nuevamente, pagará la gente.
Lo cierto, es que más allá de las elecciones internas en el peronismo previstas para marzo, la bisagra en el poder serán las legislativas. Todos buscan reacomodarse..o acomodarse. Las diferencias entre algunos peronistas no parecen ser ideológicas, sino pragmáticas. Pero un proyecto de país tan ambicioso como el kirchnerista no puede darse el lujo de permitir debilidades ideológicas. Para los K, sobre todo, impera más que nunca la posición de "quien no está conmigo, está en mi contra". Así presentadas las cosas, Quilmes con el posible triunfo partidario del oficialismo barbista se encamina a convertirse en un distrito opositor. Hoy lo es, pero en sordina. Una vez conseguido el poder partidario, será difícil evitar que crezcan las ambiciones. Lo que debe analizarse, es cuanto le convien e a la ciudad quedar en la vereda opuesta a los gobiernos de la nación y la provincia.
Algunos dirigentes que claramente quieren ser intendentes en 2011, sabiendo de buena fuente que Gutiérrez no pretenderá (y difícilmente conseguiría de pretenderla) su reelección, están evaluando futuros realineamientos. Uno de ellos nos dijo hace algunas horas: "es muy probable que la gestión de Cristina se encamine y su imagen mejore, ya que no hay nadie que desde la oposición pueda general mística y liderazgo...pero pensar en una gestión exitosa del Barba...es casi una utopía". Con este análisis, podemos prever que grado de compromiso tienen Gutiérrez y sus aliados. Pactos atados con hilos de seda. Villordo será candidato de Duhalde, por decisión propia. Una pregunta se cae de madura: ¿quién será el nuevo delfín de Aníbal Fernández en el distrito? Quizás ese apellido cuente con las mayores probabilidades de alcanzar la intendencia en 2011, si es que la gestión de Guti E9rrez no logra la aceptación social que hoy no posee y el gobierno nacional recupera la imagen perdida durante el conflicto agropecuario. La otra pregunta que nos hacemos es: ¿existe hoy ese hombre kirchnerista que sea lo suficientemente convocante como para ser el candidato a intendente indiscutido? De no ser así y de fracasar Cristina, posiblemente los macristas del distrito contarán con una oportunidad única como para llegar al poder.
Un panorama local demasiado confuso como para preocuparse por un proyecto de país que casi todos los dirigentes mencionados en este artículo juraron sostener. Una vez más, gobiernan las ambiciones por sobre los sueños y las ideas. Y la gente, financia con sus impuestos.
Agenci@ EL VIGÍA
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