62 AÑOS DE LA PRIMERA PRESIDENCIA JUSTICIALISTAUn nuevo aniversario de la asunción de Juan Domingo Perón, por primera vez como presidente de la Nación, adquiere un valor especial en los tiempos en los que corren. Enfrentamos una situación que pone en riesgo el futuro como país desaprovechando una nueva oportunidad histórica para consolidarnos como una potencia regional, tal cual lo reclamaba el Gral., líder de nuestro movimiento.
En ese sentido, recordar el 4 de junio de 1946 cuando con la fórmula “Perón-Quijano” el justicialismo hizo su entrada triunfal a la vida institucional argentina nos coloca en el compromiso de seguir el camino marcado por aquel líder histórico que supo enseñarnos acerca de lo esencial de la justicia social, la igualdad política y la soberanía nacional.
Ese es el legado que, cada uno, desde su espacio de toma de decisiones, no debe olvidar: primero está el Pueblo, él es el soberano y destinatario de la acción de gobierno. El peronismo ha demostrado a lo largo de su historia que sabe aglutinar las diferencias detrás de aquellas banderas, que sabe construir en la unidad y sabe gestionar, todas condiciones fundamentales para ejercer el poder de gobierno. Por eso, una vez más, como peronistas, miramos el pasado, no para quedarnos instalados en él sino para abrevar en la experiencia y seguir construyendo un modelo basado en nuestros líderes históricos, y dejar atrás aquellas diferencias que acentúan aun más las divisiones en la sociedad.
Consultado Manuel Quindimil señalo: “hoy algunos que enarbolan las banderas de nuestro movimiento y quienes se colocan la camiseta de justicialistas, solo lo hacen de la boca para afuera, desconociendo que el peronismo es una forma de vida. Nunca las persecuciones a los trabajadores, ni la división entre las clases sociales fueron políticas aplicadas por nuestro partido, esto no es peronismo. Debemos retomar el verdadero legado de Perón y Evita, para difundirlo y reformularlo adaptándolo a los tiempos en los cuales vivimos. Es por ello, como dijo el Gral. Juan D. Perón para un argentino no hay nada mejor que otro argentino.”
01/06/08
Prensa
Partido Justicialista
de Lanús
Ese es el legado que, cada uno, desde su espacio de toma de decisiones, no debe olvidar: primero está el Pueblo, él es el soberano y destinatario de la acción de gobierno. El peronismo ha demostrado a lo largo de su historia que sabe aglutinar las diferencias detrás de aquellas banderas, que sabe construir en la unidad y sabe gestionar, todas condiciones fundamentales para ejercer el poder de gobierno. Por eso, una vez más, como peronistas, miramos el pasado, no para quedarnos instalados en él sino para abrevar en la experiencia y seguir construyendo un modelo basado en nuestros líderes históricos, y dejar atrás aquellas diferencias que acentúan aun más las divisiones en la sociedad.
Consultado Manuel Quindimil señalo: “hoy algunos que enarbolan las banderas de nuestro movimiento y quienes se colocan la camiseta de justicialistas, solo lo hacen de la boca para afuera, desconociendo que el peronismo es una forma de vida. Nunca las persecuciones a los trabajadores, ni la división entre las clases sociales fueron políticas aplicadas por nuestro partido, esto no es peronismo. Debemos retomar el verdadero legado de Perón y Evita, para difundirlo y reformularlo adaptándolo a los tiempos en los cuales vivimos. Es por ello, como dijo el Gral. Juan D. Perón para un argentino no hay nada mejor que otro argentino.”
01/06/08
Prensa
Partido Justicialista
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