EL SENADOR DARÍO DÍAZ PÉREZ PRESENTÓ UN PROYECTO DE LEY PARA LA REALIZACIÓN DE UNA CAMPAÑA ANUAL DE PREVENCIÓN DE CAÍDAS ACCIDENTALES DE LOS ADULTOS MAYORES
EL SENADOR DARÍO DÍAZ PÉREZ PRESENTÓ UN PROYECTO DE LEY PARA LA REALIZACIÓN DE UNA CAMPAÑA ANUAL DE PREVENCIÓN DE CAÍDAS ACCIDENTALES DE LOS ADULTOS MAYORES
El proyecto etablece que la misma deberá realizarse todos los años, teniendo como mínimo una semana de duración durante la que se deberán realizar actividades institucionales de difusión y concientización. Las campañas se realizarán sin perjuicio de todas aquellas acciones o medidas que estén ya dispuestas o se dispongan en lo sucesivo en favor de la prevención de la mencionada problemática.
En su articulado, el proyecto de Ley del senador Díaz Pérez establece que la campaña estará especialmente destinada a las personas pertenecientes al grupo etario conocido como Tercera Edad, debiendo contener, entre otras recomendaciones, orientaciones respecto a cómo se debe proceder correctamente, como por ejemplo, al levantarse por la noche, posturas y procedimientos durante el baño, enumeración de accesorios de baño disponibles para evitar caídas, la importancia del retiro de obstáculos a la circulación en las viviendas y de la colocación de barandillas en las escaleras, así como todas las demás recomendaciones que se dispongan mediante la reglamentación.
Deberá incluir la realización de cartelería debidamente legible, la que será colocada en lugares visibles, tales como Hospitales o Instituciones de Salud Públicas y en los otros Organismos Públicos que tengan usual vinculación con los adultos mayores.
El Poder Ejecutivo de la Provincia de Buenos Aires dispondrá la realización de acciones publicitarias tendientes a divulgar aquello que resulte útil para prevenir esta problemática. Las campañas se realizaran anualmente durante la última semana del mes de Julio en coincidencia con el día 26 del mismo mes, fecha en la que se conmemora el “Día del Abuelo” y a la vez una fecha cara a los sentimientos del pueblo bonaerense en particular y de todo el país en general, al cumplirse en esa fecha, un nuevo aniversario del la muerte de Eva Perón, quien fuera en vida la ideóloga y creadora del “Decálogo de la Ancianidad” en el año 1948.
Se promoverá la participación en las actividades que se realicen en el marco de estas campañas, a las Asociaciones de todo tipo destinadas a los adultos mayores o de la tercera edad, Centros de Jubilados, al Colegio Medico de la Provincia de Buenos Aires; a Sindicatos y Obras Sociales Gremiales y a la comunidad bonaerense en general.
Se deberá invitar a Hospitales e Instituciones privadas de la salud, farmacias, Centros de Jubilados, Asociaciones de todo tipo destinadas a los adultos mayores o de la tercera edad y a Sindicatos y Obras Sociales Gremiales, a que se adhieran a las campañas. cabe mencionar que la campaña se realizará sin perjuicio de todas otras acciones o medidas que estén ya dispuestas o se dispongan en lo sucesivo en favor de la prevención de la mencionada problemática.
Díaz Pérez fundamentó su proyecto en que es sabido que muchas de las caídas en personas mayores son evitables y que muchas ocurren en su propio hogar, sin perjuicio de otras que acaecen en la vía pública o en otros sitios, mas lo cierto es que muchas veces ocasionan fracturas y la hospitalización de quien la padece.
Estudios realizados en nuestro país revelaron, por ejemplo, que casi el 30% de los adultos mayores de 65 años han sufrido caídas. Los mareos o tropiezos fueron los motivos más comunes. Respecto a la frecuencia, el 60% se cayó solo una vez, el 16,3% dos veces, el 13,8% tres veces, el 9,9% cuatro o más veces.
Asimismo se identificaron como “segmentos más vulnerables a las caídas” a las mujeres (34%), llegando a los 80 años o más (35,5%), quienes no están en pareja (34%) y quienes no conviven con nadie (37%).
También se verificó una mayor prevalencia de caídas entre quienes necesitan ayuda para realizar actividades diarias (42,6%).
Es también significativo el déficit comprobado respecto a la ausencia de los elementos de ayuda o agarre en las viviendas que podrían ser medidas de prevención de accidentes o caídas, especialmente en el baño; mientras que cuatro de cada diez adultos mayores tienen muebles u objetos que obstaculizan la circulación (1).
Como se dijera las caídas, y las numerosas fracturas de cadera que provocan, constituyen una de las causas más frecuentes de ingreso hospitalario entre las personas mayores.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) se define la caída como “consecuencia de cualquier acontecimiento que precipite al paciente al suelo en contra de su voluntad”. Se consideran la segunda causa mundial de muerte por lesiones accidentales o no intencionales. La mayoría de las caídas no suelen tener consecuencias o éstas son leves. Se estima que el 5% de las caídas causan lesiones graves, cuyas consecuencias son: Discapacidad temporal o permanente; Aumento de estancias hospitalarias; Complicaciones de la evolución de la enfermedad; Problemas psicosociales: Síndrome Postcaída (miedo a volver a caerse).
Los adultos mayores tienen más riesgos de accidentes domésticos y están más propensos a las caídas. En muchos casos esos accidentes se pasan por alto o se minimizan, pero estudios internacionales ya admiten que esos acontecimientos involuntarios en personas de entre 65 y 80 años son un problema mundial de la salud pública, que requiere de estrategias de prevención, mayor capacitación en especialistas, creación de entornos seguros y políticas eficaces para reducir riesgos. En los hospitales públicos de la Provincia de Buenos Aires, 2 de cada 5 adultos de más de 80 años han referido al menos una caída al año, y existe una alta prevalencia de fracturas de hombro y muñeca, como consecuencia directa de esos episodios.El costo medio para el sistema sanitario por cada lesión relacionada con caídas en mayores de 65 años es de US$ 3611 en Finlandia y US$ 1049 en Australia. Como se mencionara los ancianos son quienes corren mayor riesgo de muerte o lesión grave por caídas, y el riesgo aumenta con la edad. Por ejemplo, en los Estados Unidos de América, las caídas son la principal causa de muerte accidental y la 7ª causa de muerte en personas de 65 años o más; un 20 a 30% de las personas mayores que se caen sufren lesiones moderadas o graves, tales como hematomas, fracturas de cadera o traumatismos craneoencefálicos.
La magnitud del riesgo puede deberse, al menos en parte, a los trastornos físicos, sensoriales y cognitivos relacionados con el envejecimiento, así como a la falta de adaptación del entorno a las necesidades de la población de edad avanzada. Las estrategias de prevención de las caídas deben incluir clara comunicación por parte del Estado respecto de los factores de riesgo y de como utilizar estrategias preventivas eficaces; que creen entornos más seguros y reduzcan los factores de riesgo; promoviendo la educación individual y comunitaria para aumentar la concienciación. Los programas eficaces de prevención de las caídas tienen como objetivo reducir el número de personas que las sufren, disminuir su frecuencia y reducir la gravedad de las lesiones que producen. Los programas de prevención de las caídas en los ancianos pueden incluir varios componentes para identificar y modificar los riesgos. Es bien sabido que es mucho mejor “prevenir que curar”. Es por ello que la realización de las campañas sin duda mejorará la calidad de vida de este importante grupo etario.
(1) datos del “Estudio de investigación sobre seguridad en el domicilio de personas mayores” elaborado por la Fundación MAPFRE Argentina a base de una encuesta realizada en el área metropolitana de la Ciudad de Buenos Aires y las principales ciudades del interior del país.
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Prensa & Comunicación
Daniel Lancellotti
156-373-8617
Febrero 2018
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