El coronel Juan Domingo Perón preso en la isla Martín García dudaba de continuar participando en política. Sin embargo la enorme movilización de miles de obreros reclamando su liberación cambio la historia. Entre los iniciadores de ese reclamo se encontraba Eva Duarte, que entre los obreros arengaba defender a Perón y el dirigente de la carne Cipriano Reyes, que marcho desde Berisso al frente de una numerosa columna.
Horas antes de la multitudinaria marcha el coronel Perón había ingresado al hospital militar aquejado de una dolencia y de allí pasó ser inmortal para el pueblo que logró liberarlo. El gobierno encabezado por el vecino de Lanús Edelmiro Julian Farrel temeroso de lo que podía pasar con semejante masa de obreros en la calle ordenó liberarlo. Esa misma gente que había sido gestora de su libertad luego lo voto, cuando se presento como candidato presidente de la Nación. Luego gano dos elecciones más. Solamente perdió el poder por la fuerza de las armas que lo derrocaron, aunque siempre estuvo y esta en el corazón de los humildes que lo habían elegido para gobernar.
Años más tarde, vinieron otros enarbolando su bandera, pero solamente lograron llenar sus bolsillos y generar pobreza por doquier, por eso hoy, a más de siete décadas de ese primer Día de la Lealtad los que entendieron su doctrina, la doctrina social de la iglesia lo recuerdan.
S.G
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