Graves incidentes se produjeron hoy en el club El Porvenir durante un allanamiento llevado a cabo por el fiscal de Lomas de Zamora, Pablo Rossi, con el objeto de poner en funciones a la comisión directiva electa el 29 de noviembre de 2015, entonces encabezada por Merelas, que en la asamblea del 14 de febrero de 2016 decidió denunciar penalmente al presidente como autor de varios delitos en perjuicio de la institución y lo apartó del cargo, además de suspenderlo como socio.
La grave crisis en el Porve es de larga data. Enrique Merelas lleva décadas como presidente, tiempo durante el cual el club sufrió varios descensos de categoría y se fue endeudando paulatinamente. Los propios compañeros de comisión directiva investigaron y apartaron a Merelas, quien resistió la medida ocupando las instalaciones que la institución posee en Lanús Oeste. En el mes de mayo de 2016, el área de Personas Jurídicas del Ministerio de Justicia de la Provincia de Buenos Aires decidió validar una supuesta asamblea llevada a cabo día 15 del mismo mes, que le devolvió el poder a Merelas, quien contó con el apoyo del senador provincial José Luís Pallares y del intendente de Lanús, Néstor Grindetti.
La semana pasada, la Cámara Segunda de Apelaciones decidió anular el aval que Personas Jurídicas le había otorgado días antes a Enrique Merelas, ordenando que la comisión directiva encabezada por Carlos Besana, Héctor Varela, Carlos Suárez y Fausto Paraíso Pinto retome el mando en el club, trámite que el fiscal Pablo Rossi estaba llevando a cabo en la mañana de hoy acompañado por 40 policías de la provincia de Buenos Aires, cuando irrumpió Merelas acompañado por su mujer y apoyado por individuos que viven en el club, hasta ser detenido y conducido a una dependencia policial.
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