Martes 21 Oct 2014 | 08:58 am
Fiesta en la comunidad católica de Lanús.
Lanús (Buenos Aires) (AICA): La comunidad católica del partido de Lanús se congregó el pasado miércoles 15 de octubre para celebrar la fiesta de santa Teresa de Jesús, patrona de este municipio y patrona secundaria de la diócesis. El obispo diocesano, monseñor Rubén Frassia, invitó a imitar el ejemplo de santa Teresa, siendo alegres, orantes y humildes.
La comunidad católica del partido de Lanús se congregó el pasado miércoles 15 de octubre para celebrar la fiesta de santa Teresa de Jesús, patrona de este municipio y patrona secundaria de la diócesis. La jornada festiva comenzó, como en los últimos años, con una procesión desde la capilla erigida en honor de la santa y continuó hasta la parroquia San Judas Tadeo.
La misa principal fue presidida por el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, quien invitó a reconocer su fidelidad a la Iglesia, a pesar de las incomprensiones que vivió, su alegría constante y su trato constante con Dios a través de la oración. El obispo señaló que santa Teresa “supo tomar en serio el amor a Jesucristo, tan en serio que lo pudo encarnar en su vida, internalizarlo y vivir de un modo total en toda su vocación carmelita”.
Monseñor Frassia destacó que, en la vida de la Iglesia, puede haber muchos sufrimientos, pero nunca debe perderse la causa de la alegría. Al respecto, señaló que Teresa “era una mujer de mucho humor”, que no estaba triste porque se sabía en una profunda alegría en el Señor.
“Hoy más que nunca nos tenemos que preguntar ¿qué nos dice esta presencia en la Iglesia? ¿Qué nos dice esta mujer? La primera es la alegría de saberse tomada por Dios; alegría que no se empaña con las dificultades sino que, al contrario, le daba resistencia, perseverancia, firmeza y permanencia”, observó.
“El segundo elemento –agregó- es la oración. Ella sabía que tenía que tratarlo a Dios, en silencio, hablando con Él, sabiendo que Dios escucha. Esa oración mental, esa oración del corazón, nos enseña que si queremos hacer algo en la vida, un ministerio, un apostolado, no podríamos hacerlo si no vivimos en oración, porque la oración es la fuerza de nuestro apostolado, nuestra entrega y nuestro servicio. La oración nos compromete en el servicio del amor, pero ese amor está contenido y respaldado por la oración”.
Monseñor Frassia también destacó la humildad apoyada en la verdad de la santa: “Ella reconocía a Jesucristo, estaba ubicada y sabía bien quién era el centro: el centro de su vida era Cristo, no era ningún otro; sabía que era su cimiento y ponía su total confianza”.
El obispo alentó a la comunidad a pedir al Señor, por medio de Santa Teresa, que ayude a vivir la entrega y perseverar en la pertenencia a la Iglesia. “Ella sabía que en la Iglesia estaba Jesucristo”, reconoció.
Al día siguiente, el intendente de Lanús, Darío Díaz Pérez, participó de una misa presidida por el presbítero Oscar Garay en la parroquia San Judas Tadeo para inaugurar oficialmente el Año Jubilar Teresiano.
Junto con el jefe comunal, asistieron el presidente del Concejo Deliberante, Héctor Bonfiglio, y varios ediles y secretarios del ejecutivo distrital. La comunidad religiosa y educativa del colegio Santa Teresa de Jesús, alumnos, familiares y vecinos también se sumaron a la misa. +
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