Martes 29 Jul 2014 | 09:07 am
Padre José Fabián Camayo Jaramillo, de Ecuador.
Avellaneda (Buenos Aires) (AICA): El Servicio Sacerdotal de Urgencia crece a ritmo sostenido en el Ecuador repitiendo la experiencia originaria nacida en la Argentina. Así como sucede en varias diócesis de la Argentina, ahora las personas que viven en Quito, la capital del país, tienen la posibilidad de recibir atención espiritual en situaciones de urgencia, durante la noche y ante la posibilidad de llegarles la muerte. Así lo contó el padre José Fabián Camayo Jaramillo, asesor del recientemente creado Servicio Sacerdotal Nocturno, de paso por Buenos Aires.
El Servicio Sacerdotal de Urgencia crece a ritmo sostenido en el Ecuador repitiendo la experiencia originaria nacida en la Argentina. Así como sucede en varias diócesis de la Argentina, ahora las personas que viven en Quito, la capital del país, tienen la posibilidad de recibir atención espiritual en situaciones de urgencia, durante la noche y ante la posibilidad de llegarles la muerte. Así lo contó el padre José Fabián Camayo Jaramillo, asesor del recientemente creado Servicio Sacerdotal Nocturno, de paso por Buenos Aires.
El sacerdote oblato llegó a la Argentina para conocer con más detalle a los referentes del Servicio Sacerdotal de Urgencia en la Argentina. Su trabajo, al momento, se ha focalizado en impulsar esta actividad ministerial, tanto en los sacerdotes que se disponen a la atención nocturna como en los laicos que los acompañan.
El padre Camayo hace guardia sólo los cuartos domingos de mes, junto a otros tres o cuatro laicos que están en la capilla del Inmaculado Corazón de María, donde atienden llamados entre las 21 y las 6. Mientras esperan posibles comunicaciones, adoran al Santísimo.
Cuando son convocados, no solo administran la unción de los enfermos, sino que inician un trabajo catequético para administrar al moribundo cualquier otro sacramento. Sus ámbitos de trabajo suelen ser los hospitales, sanatorios o geriátricos.
El sacerdote estuvo alojado en la sede del Servicio Sacerdotal de Urgencias de la diócesis de Avellaneda-Lanús, y dedicó estos días a atender enfermos y moribundos, presidir encuentros espirituales y mantener reuniones con los “guardianes” diocesanos. También tuvo la gracia de visitar la basílica de Nuestra Señora de Luján y concelebrar la misa con el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Frassia.
El SSU de Avellaneda-Lanús atiende gratuitamente las 365 noches del año, de 21.30 a 6, en avenida Belgrano 658 de Avellaneda. Su teléfono es (011) 4201-3000.+
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